Ene 27, 2019 | Pareja |
Quizás el término lo podrías relacionar muy cercanamente a una relación de pareja que sufre a los años pleitos y contiendas que van y vienen, uno inicia y otro termina, algo así como ataque y defensa, ¿te parece conocida esta práctica en tu matrimonio?
Bien, te seré sincera eso formaba parte de mi estilo de vida con mi amado esposo, nos acusábamos el uno al otro, hasta llegar a la frustración, cada vez nos entendíamos menos y peleábamos más.
Quiero decirte que esta forma de vivir crea mucho daño en la pareja, se va perdiendo el respeto, el amor y la tolerancia, estas acciones tienden a la pareja aislarse y distanciarse física, emocional y espiritualmente.
Me pasaba algo, muy dentro de mí decía: ¿con quién estoy casada? Lo desconozco por completo, él decía amarme y estar de acuerdo conmigo en TODO y ahora sólo obtengo de él menosprecio, silencio y sin la mínima intención de resolver nuestros asuntos.
Me di cuenta que lo que antes nos unía hoy nos distanciaba, lo que antes amaba de él ahora lo renegaba… era como que antes me gustaba que fuera tan reservado y callado (porque lo miraba interesante) pero ahora ocasionaba en mí mucho descontento porque quería un esposo que pasara hablando conmigo todo el día y la noche.
Aprendí a los años (seis exactamente) que ambos veníamos de familias totalmente distintas, y que las maneras de ver las cosas y enfrentar los problemas eran totalmente diferentes para él y para mí. Él las resolvía callando y dejarlo todo para después en cambio yo lo resolvía el mismo día aunque pasáramos horas y horas con los ojos llorosos cerca de la cama.
Así que empecé por pedirle a Dios sabiduría para entender a mi esposo (seguramente él pedía lo mismo) porque estábamos desgastándonos cada vez más el amor y respeto que teníamos en el principio de nuestra relación.
Dios empezó a trabajar conmigo y llenarme de la conciencia de que tenía que amar a mi esposo por encima de nuestros conflictos, empecé a caer en la realidad: que me había casado con un humano y no un robot al que programaba para que hiciera lo que yo quisiera y que no eres perfecto, que tarde o temprano iba a errar y ¡sorpresa! Entender que yo tampoco era infalible y que también cometía errores sólo que mi orgullo y creerme la perfecta no me dejaba ver que estaba cometiendo los mismos o peores errores.
Con la ayuda de Dios llegué a la conclusión que debía aceptar a mi esposo con sus diferencias, sus defectos e imperfecciones, empecé a centrar mi atención en lo bueno que había en él, así despejaba mi mente de una turbulencia y empecé con la ayuda de Dios a cambiar el estilo de Ping pong a un estilo de amar y perdonar.
1ra de Pedro 4:8 Haya sobretodo amor entre ustedes, porque el amor perdona muchos pecados. Entendí en este pasaje Bíblico que debo sanar mi corazón cada día y alcanzar la sabiduría de Dios para seguir siendo fiel a la promesa que en el altar prometimos de vivir juntos por siempre y no hasta que los pleitos nos separen.
La vida conyugal te enseña muchas imperfecciones, entre más pasa el tiempo tendemos a esperar más y lo mejor del cónyuge, ahora lo importante es entregar mi vida a Dios y pedirle a EL que me ayude a ser yo la que pueda dar lo mejor a mi cónyuge, porque para que pueda cosechar primero tengo que dar y dar constantemente y hacerlo como para Dios, al final segaremos si no desmayamos, así que cuando pelees contra tu cónyuge piensa que estás peleando contra tu matrimonio, no te hagas más daño, vence el mal con el bien.
Pídele a Dios cambiar la actitud y ver sus diferencias como una oportunidad para complementarse el uno al otro, estoy segura que muy adentro de esas diferencias están las mejores intenciones del uno para el otro.
Posteriormente escribiré acerca de las “Expectativas en el Matrimonio” donde te darás cuenta que son las causantes de las frustraciones en tu relación de pareja y cómo mejorarlas sin perder de vista que puedes seguir esperando lo mejor en tu matrimonio pero de una manera saludable.
El consejo más importante para tener un Matrimonio en armonía y vivir felices, es que Cristo Jesús sea el Centro de la familia. Con Él cada área podrá ir siendo restaurada, solo debes invitarlo, creyendo en tu corazón y con humildad a que el tome control de tu Matrimonio, realizando la siguiente oración: «Señor Jesús te necesito, me arrepiento de todos mis pecados, te acepto en este momento en mi corazón, te reconozco mi salvador personal y te pido inscribas mi nombre en el libro de la vida; te pido que seas el Centro en mi corazón y mi familia, ordena mi Matrimonio, ayúdanos, sé que solo contigo seremos verdaderamente felices, gracias Jesús, AMEN».
Dios te bendiga.
Ene 27, 2019 | Pareja |
Desde 1983 se describieron las inteligencias múltiples por el Dr. Gardner en la Universidad de Harvard, esto explica que podemos ser no muy buenos en algunas áreas como las que se evalúan en los colegios (que mantienen su metodología desde hace más de 200 años), y aun así ser exitosos en la vida, y lo contrario es cierto también, los mejores alumnos no siempre tienen éxito en sus vidas; Se describen Inteligencia como la cinestésica que es capacidad extraordinaria con los movimientos del cuerpo, esto lo tienen quienes hacen deporte y bailan por ejemplo, Inteligencia Musical, genios que les es muy fácil dominar instrumentos y crear música, y las mas conocidas como la Lógica Matemática y la Lingüística, las únicas evaluadas en los colegios.
Pero hay dos de estas inteligencias que tienen que ver, con como me relaciono con los demás y conmigo, estas son la Inteligencia Interpersonal e Intrapersonal respectivamente, y es de estas dos que se compone la inteligencia Emocional, es decir, las capacidades que pueda tener de llevarme bien con los demás y conmigo mismo.
Al igual que en el colegio hay quienes puedan ser brillantes y otros ir aplazados en esta Inteligencia, la buena noticia es que puede mejorarse ilimitadamente, a diferencia del cociente intelectual que no puede alterarse mucho, es decir puedo mejorar la forma en que trato a los demás y como me trato a mí.
De los 5 pilares que se describen en Inteligencia Emocional, quiero referirme al 4to pilar que es la Empatía. Autoconciencia, autocontrol, automotivación y habilidades sociales son los otros cuatro pilares y todos influyen directamente en la relación de pareja, pero dos son de la Inteligencia Interpersonal, es decir de como me relaciono con los demás: Empatía y habilidades sociales, los tres otros son Intrapersonal (como me controlo y trato a mí mismo).
Y es que cuando el Señor nos dice que debemos soportarnos unos a otros, es porque tenemos la capacidad de hacerlo o de desarrollar esta habilidad. Si definimos Inteligencia como la capacidad de resolver problemas, entonces el adquirir empatía seria la capacidad de resolver el problema de Entender a mi conyugue, cosa que se vuelve muy difícil.
Hay que aclarar que de esta habilidad es más fácil para mujeres que hombres, esto dado por el desarrollo mayor del cerebro medio en la mujer que es donde esta esta habilidad, así que al hombre se le hace mas difícil ponerse en lugar de otra persona, en este caso de comprender a su esposa. Aquí redica la importancia de meditar sobre este tema y entrenar como desarrollar esta habilidad, lo bueno es que el Espíritu nos ayuda, y de hecho una de las muestras que EL esta obrando en una persona es que su Inteligencia Emocional aumenta es decir progresa en Templanza(dominio propio), Bondad, Mansedumbre, todas habilidades de Autocontrol y en Amor que es la capacidad de ver a mi conyugue y entenderle a pesar de sus defectos, sintiendo lo que siente y disponiéndome a ayudar: esto define Empatía: que es ver el sentimiento de otro, sentir lo que esta sintiendo y hacer algo para ayudar. Entre más Empatía desarrollo más fácil me será comprender y Amar a mi pareja.
El consejo más importante para tener un Matrimonio en armonía y vivir felices, es que Cristo Jesús sea el Centro de la familia. Con Él cada área podrá ir siendo restaurada, solo debes invitarlo, creyendo en tu corazón y con humildad a que el tome control de tu Matrimonio, realizando la siguiente oración: «Señor Jesús te necesito, me arrepiento de todos mis pecados, te acepto en este momento en mi corazón, te reconozco mi salvador personal y te pido inscribas mi nombre en el libro de la vida; te pido que seas el Centro en mi corazón y mi familia, ordena mi Matrimonio, ayúdanos, sé que solo contigo seremos verdaderamente felices, gracias Jesús, AMEN».
Ene 26, 2019 | Finanzas, Pareja |
Hay mucho de que hablar cuando del manejo de dinero se refiere en una pareja, ya que lograr ponerse de acuerdo, cuando se tienen maneras de usar el dinero tan diferente, es muy difícil.
Hay diferencias que están dadas por la forma en que cada uno aprendió de sus padres, de errores personales y en el mejor de los casos de libros y educadores en finanzas, pero hay una diferencia que es más profunda y más básica, presente en la mayoría de las parejas (más del 85%): la Biológica, es decir la que ya traemos solo por haber nacido, sin ningún tipo de influencia, la que esta dada por nuestro cerebro aun sin haber ingresado ninguna enseñanza.
Conocer y concientizarnos que somos así de nacimiento debería ayudarnos a ser más Tolerantes, aun así, cuanto problema causo en mi matrimonio, y es que además de conocimiento es necesario lograr vernos como Dios nos ve el uno al otro para poder soportarnos, comprendernos y ayudarnos.
Esta diferencia consiste en que la Mujer es más “Realista” que el Hombre, y de naturaleza el Hombre es mas “Optimista” que la Mujer, aunque suene que no es nada malo, cuanto daño causa el no comprender esto.
Esta forma “realista” de ver las cosas por ejemplo hace más difícil a la mujer tener Paz y descansar en Dios, cuando las finanzas son problema, por otro lado, el Hombre en su “Optimismo” pueden pasar los años y continuara sin escuchar ni modificar su actuar, aun cuando las cosas no estén saliendo bien, porque desde su punto de vista “pronto” todo va a estar mejor.
Entonces esta la mujer estresada, preocupada y genera quejas que vistas por el hombre resultan injustificadas, el esta tranquilo y promete que todo va a estar bien, hasta que un día se “hartan” de tanto discutir y a veces ni siquiera identifican la causa de las discusiones, y es que una vez más “Las Finanzas” son la causa de otra separación como en el 70% de los casos.
Son muchos los escenarios que se dan alrededor de las finanzas, pero este patrón es de los más frecuentes y doloroso, el consejo es:
HOMBRES deben comprender que la Mujer necesita sentir seguridad, y es su deber luchar y escuchar como ellas logran sentir esa seguridad, ejemplo: si la compra de un carro ella siente que causara desajuste en el presupuesto hay que conversar, escuchar y decidir tomando en cuenta su opinión, dejando a un lado la actitud machista de “yo sé más”. (de no hacerlo se aseguran años de infelicidad)
MUJERES, deben esforzarse por depender y descansar en el Señor (El es su proveedor), mostrando Paz y orar para que a su Esposo Dios lo use como proveedor, y con su actitud poder “influenciar” para el correcto uso del dinero, ayudando a administrarlo mejor.
Finalmente, si logras identificar que de alguna manera las finanzas son el tema conflicto, deben buscar ayuda en Terapia de pareja, ayuda mucho el poder hablar del tema sin pelear, es necesario comunicarse mucho entorno a la situación financiera de la familia, evitar hablar del tema empeorara la situación siempre.
El consejo más importante para tener un Matrimonio en armonía y vivir felices, es que Cristo Jesús sea el Centro de la familia. Con Él cada área podrá ir siendo restaurada, solo debes invitarlo, creyendo en tu corazón y con humildad a que el tome control de tu Matrimonio, realizando la siguiente oración: «Señor Jesús te necesito, me arrepiento de todos mis pecados, te acepto en este momento en mi corazón, te reconozco mi salvador personal y te pido inscribas mi nombre en el libro de la vida; te pido que seas el Centro en mi corazón y mi familia, ordena mi Matrimonio, ayúdanos, sé que solo contigo seremos verdaderamente felices, gracias Jesús, AMEN».